9 de julio de 2025

La presión alta y la posición de Tchouaméni son las claves para ganar al PSG

Magazine SLV. Artículo de opinión de Julio Gómez

El duelo entre el Madrid y el PSG del miércoles se antoja apasionante en cuanto al morbo se refiere, pero también en lo táctico. Por un lado los blancos están en construcción y por otro los franceses ya han hecho un equipo con Luis Enrique como capitán. Con este dato cualquiera podría decir que hay un claro favorito, pero tener enfrente al 14 veces campeón de Europa es un motivo de peso como para no lanzar las campanas al vuelo. Mucho más teniendo a Xabi Alonso como «el hombre de la pizarra». La presión alta y la posición de Tchouaméni son las claves para ganar al PSG. Si el equipo del jeque sufre en la salida del balón gracias al trabajo de los hombres de arriba el Madrid se llevará el partido. También si esa defensa de cinco se convierte en cuatro por momentos para igualar el mediocampo talentoso galo. Hay razones para creer.

Foto: Marca

En ese trabajo para robar la pelota será clave la presencia de Mbappé. Gonzalo lo ha hecho genial. Sin embargo, el mejor jugador del mundo ya está recuperado. No debería haber dudas en sentar al canterano y darle minutos en la segunda parte para que caze algún balón aéreo. Se merece jugar mucho esta temporada, pero para un duelo de esta entidad hay que poner a profesionales con experiencia. Además, Kylian es especialista en recoger balones, correr y anotarlos. A eso se va a jugar el miércoles. Su apoyo con Vinicius puede hacer el resto para llevar al equipo a la final. La pausa ya la tratará de poner el PSG.

Vitinha y su calidad en el medio, Dembelé, Achraf, Nuno Mendes… Hay mucho nombre bueno en el Paris Saint Germain. Sí, pero Valverde, Bellingham, Arda o Fran García igualan fuerzas. También estará pareja la defensa con las bajas de Huijsen, Pacho y Lucas Hernández. Ahí Asensio tiene que marcarse el mejor partido de su vida en salida de balón. Tiene condiciones para hacerlo. Seguro que con andamios y con drones estos futbolistas ya saben que deben hacer un esfuerzo de 90 minutos perfecto. Se juegan el pase a la final del Mundial de Clubes, pero va mucho más allá. Es eliminar a un rival directo y dejarle tocado en lo mental. Ganas de partidazo. Presión y Tchoaméni son las claves.