Va de esto, idiotas

Magazine SLV. Alcobendas. Artículo de opinión de Miguel Ángel Arranz, presidente de Por Alcobendas

En Alcobendas ya no queda ni disimulo. Mientras tú haces malabares para llegar a fin de mes, la clase política del Ayuntamiento se sube el sueldo con una coordinación envidiable. Aquí no hay pactos de gobierno, hay pactos de nómina. Y en eso, curiosamente, están todos de acuerdo.

Foto: Ayuntamiento de Alcobendas

Tras las elecciones de 2023, la nueva alcaldesa Rocío García (PP) se sentó en su sillón cobrando más que su antecesor, y acto seguido el pleno aprobó sueldos de escándalo para toda la cadena política. Tenientes de alcalde con casi 75.000 euros al año, concejales del gobierno por 69.500, portavoces de la oposición igualando cifras. Todos cómodos, todos satisfechos.

¿Y la oposición? Está por estar. No fiscaliza, no denuncia, no se planta. Calla. Porque cuando les ponen una nómina delante, dejan de ser oposición y se convierten en plantilla. Son decorado. Están ahí para decir que el pleno es democrático, pero su función real es no molestar.

La alcaldesa, además de su sueldo fijo, cobra dietas por su presencia en consejos de administración de empresas municipales. Y esas dietas, por supuesto, también han subido. Todo legal. Todo aprobado. Todo en silencio.

Y para colmo, cuando alguien les pregunta por qué no rechazan esa subida, algún concejal tiene la desfachatez de decir que “es por ley” y que “como a todos los funcionarios les sube el sueldo, a nosotros también”. Un argumento tan ridículo como indecente: esto no es una nómina impuesta por el BOE, es una decisión política votada a mano alzada, y la mano la levantaron todos sin temblar.

Y no todos lo aceptamos. Algunos votamos en contra en su momento, y lo volveríamos a hacer. Porque es de sentido común: no puedes subirte el sueldo mientras subes el IBI, creas un nuevo impuesto de basuras y reduces servicios. Pero para el resto, eso no importa. Lo único que les mueve es lo que cobran. No lo que tú pagas.

Hay concejales que hace un año despellejaban a la alcaldesa en redes, y ahora están sentados con ella cobrando 45.000 euros por una jornada parcial. Del insulto al pacto, del reproche a la transferencia bancaria. Todo muy ético.

Mientras a ti te llega el recibo del IBI incrementado y un nuevo impuesto de basuras, que no te engañen. Esto no va de ideología, ni de gestión, ni de vecinos.

Va de esto, idiotas.

Miguel Ángel Arranz
Presidente de Por Alcobendas